La perduración de las empresas fabricantes de
módems para los operadores depende de las permanentes innovaciones: fibra
óptica de 10 gigabits, internet inalámbrico de última generación, asistentes de
voz... Deben mantener el valor del producto mientras algunas características
desaparecen (DVD, almacenamiento).
La revancha. Pocos meses después del lanzamiento al mercado
del último módem Freebox, el pasado 18 de julio la compañía de
telecomunicaciones SFR presentó su módem de última generación, equipado con las
últimas tecnologías. Como fuimos informados el martes, decidió cobrar 5 euros
al mes además de su suscripción. Para los operadores el módem sigue siendo un
importante elemento y aquello que les permite diferenciarse entre ellos. Detrás
de todas estas guerras de marketing, sin embargo, se desata una salvaje carrera
entre los fabricantes.
Según IHS Markit, existen unos treinta fabricantes de
módems en el mundo, generalmente ocultos a la vista del público, los cuales comparten
un mercado de 250 millones de módems por un valor de 12 mil millones de
dólares. El segundo mercado, de iguales dimensiones, es el de los
decodificadores de TV.
Solo cinco
compañías comparten dos tercios de las ventas. Aquí se incluyen dos compañías
francesas: Technicolor, que encabezó las listas
con una participación del mercado del 14% en el último trimestre de 2018, y Sagemcom, que ocupó el quinto lugar en la lista con el
9% de las ventas globales, lo cual no le debe de gustar mucho a la compañía
estadounidense Arris, y especialmente a las compañías chinas Huawei y ZTE.
"Nuestra
supervivencia en la carrera con los proveedores asiáticos depende de nuestra
capacidad para integrar las últimas tecnologías y adaptarnos completamente a
las necesidades personales", explicó uno de los representantes europeos.
"Ofrecer productos estándar está fuera de discusión".
A los
operadores europeos, a los franceses en particular, les encantan los módems
personalizados. Technicolor y Sagemcom poseen un poco menos de un tercio del
mercado europeo. El primero en Francia suministra equipos al operador Bouygues
Telecom. El otro coopera con todos los operadores en la producción de los módems
más modernos... La excepción entre los operadores es Free, el único prodigio
que vigila celosamente el diseño y la fabricación de su propio módem Freebox.
Cada vez menos atractivos
Para los operadores y también para los fabricantes es
esencial mantener el valor de su producto. Los módem de gama baja cuestan
alrededor de treinta euros, en comparación con unos cien euros que hay que desembolsar para un módem de alta gama. El problema es que, año tras
año, los módems son cada vez menos atractivos.
A medida que
se desarrolla el uso, algunas de sus características se vuelven inutilizables.
El reproductor de DVD ha desaparecido de los módem. El conector para el
teléfono fijo es un fantasma del pasado que tiene muy poco interés. Los
clientes ya no sueñan con discos duros integrados. “Para la mayoría de las personas, los servicios en la
nube como Dropbox e iCloud son suficientes. Sin embargo, los usuarios
profesionales recurren a soluciones de almacenamiento específicas que no son
importantes para ofrecer a todo el mundo", explicó Mitja
Golja, director técnico de Iskratel, el fabricante esloveno con una fuerte
presencia en Europa del Este y proveedor de los operadores alternativos
franceses.
Incluso los
televisores pueden estar condenados a desaparecer. Los jóvenes miran los
contenidos de vídeo en línea. Sin embargo, los hogares están cada vez más
equipados con TV en línea que solo necesitan acceso a Internet. "4K ha brindado un nuevo impulso,
pero en su mayor parte las tendencias apuntan hacia abajo", confirmó uno
de los fabricantes.
Transmisión 10 G
Aquel que desee sobrevivir, debe ser innovador. El
elemento clave es, sin duda, la conectividad. Los módems más potentes (de cable
o de fibra óptica) son los más caros. Y la carrera de velocidad está en pleno apogeo.
Este año Free ha sido el primero en Francia en introducir un módem con una
velocidad de 10 Gb/s, diez veces la velocidad normal que ofrecen los
competidores.
“Las
tecnologías 10G permanecen en la periferia. Son tres veces más caras",
pone las cosas en perspectiva Mitja Golja. “Nadie las necesita todavía. No se
requieren para las descargas de video, incluso a 8K. De hecho, actualmente no
sirven más que para las pruebas de velocidad... Pero con la realidad virtual,
eso cambiará. Y tan pronto como los principales operadores chinos o
estadounidenses envíen decenas de millones de módems 10G al mercado, los
precios caerán. Solo tendremos una prima del 20 al 30%".
Presión sobre las ganancias
Además de la
velocidad, hay muchos otros factores relacionados con la tecnología
inalámbrica. ¿Cómo garantizar una red inalámbrica de calidad dentro de los
hogares? Por ejemplo, la integración de los nuevos estándares proporcionados
por SFR con su nuevo módem Box 8 podría ser de ayuda. Sin embargo, todavía
requiere teléfonos inteligentes, tabletas y otras computadoras compatibles.
Como resultado, la industria se ha vuelto en gran medida hacia los repetidores
de señal inalámbricos como motores de crecimiento.
Por lo tanto los
fabricantes necesitan las mejores tecnologías y las tecnologías más
actualizadas para convencer a los operadores... y mantener sus ganancias. Sobre
todo porque el precio de los componentes electrónicos, como los chips de
memoria, ha aumentado constantemente en los últimos tiempos. Technicolor estima
en su
último informe anual que perdió 45
millones de euros en EBITDA solo en 2018, o 2 puntos de margen EBITDA. Otra
razón para redoblar sus esfuerzos con el fin de volver a ascender en la escala
de manera constante.